"Confía...

...en quién confía en ti.
Pero cree en lo que nadie cree.

La Princesa.

La princesa.

Sus cabellos plateados acariciaban el pasto donde se encontraba dormida, aquella princesa vestida con un desgastado vestido color oliva, descansaba con los ojos cerrados; esperando así que no cayeran más lagrimas, lagrimas que humedecían el pasto como el rocío que nunca apareció. Su corazón latía lentamente mientras la luna le decía en secreto que sabía donde estaba su caballero. La princesa había olvidado sus ojos, pero no los de él, la princesa había olvidado como era el sonido de su voz, pero no como era la voz de él. "Hablame más del caballero, querida Luna." - susurraba apenas abriendo los labios secos que le impedian gritar. 12 estrellas entristecidas observaban a la princesa levantarse con pesar del pasto, la corona que alguna vez había decorado sus cabellos había desaparecido. "No me digan que me ha olvidado." El cielo se movía rápidamente sobre sus ojos, las nubes pasaban tapando las estrellas, colores rojizos indicaban que el Sol quería volver, pero la noche no iba a permitir que hubiera un solo día más hasta que el Caballero no encontrara a la Princesa, hasta que la Princesa no buscara al Caballero. Del cielo cayó como una pluma en descenso una pequeña estrella dorada. "Regresa. Regresa Princesa." ¿Donde estaba su corona? ¿Donde estaba el caballero? ¿Donde estaba su corazón?

And nothing else matters...

So close, no matter how far
Couldn't be much more from the heart
Forever trusting who we are
and nothing else matter.

En algun lugar... allá afuera, deben estar las respuestas.

 

Deberian comenzar a volar hacía el cielo, todos los sueños y como globos amarrados con cordones negros tirar de ti hasta alcanzar el universo. Deslizarte por cada nebulosa y dejar tu firma en las estrellas más brillantes, buscar las respuestas a los místerios de la tierra y flotar sin peso hasta ese lugar, ese lugar a donde todos van al cerrar los ojos.

El Caballero.

El caballero.

La noche era serena y obscura, en su armadura se reflejaba la luna lejana que aún cuidaba sus pasos cansados; que andaban por ese castillo destruído. Su barba plata llegaba hasta los inicios de su corazón, aquél corazón apuñalado que latía desde hacía tanto tiempo con pesar. Sus ojos habían olvidado cómo eran sus ojos y sus oídos no recordaban su propia voz, en aquel castillo destruído el caballero había perdido su memoria. Aveces cuando no escuchaba su respiración adolorida salía al balcón a platicar con las estrellas, que él veía cada vez más lejanas. "¿A donde se van?" - preguntaba todas las noches el caballero a las mismas 12 estrellas que abrazaban a la luna. Abajo del castillo los huesos de un enorme dragon dormido eran él único recuerdo visible que tenía el caballero... aveces sus memorias regresaban al ver los enormes huesos de las alas extendidas. ¿Donde había quedado su espada?  ¿Donde estaba la Princesa? ¿Donde estaba su corazón?

Pasos...

Iba caminando sin prestar atención a mis pasos, solo me conducía y por inercia mis piernas me llevaban a "quién sabe que lugar.". Aún vacilaban mis ojos en aquella noche, cambiaban de "eso" a "aquello" se aseguraban de no recordar ninguno de los objetos a mi alrededor, no quería más fotografías en mi memoria.

De pronto tirado a un lado de ese camino me encontré una hoja de papel perfectamente extendida para que desde lo alto de mis ojos pudiera notar las diminutas letras creadas con tinta azúl. El papel desprendía un olor entre viejo y un aroma conocido que hizo temblar mis manos al recogerlo, era tan frágil como mis temblorosas piernas y decidí sentarme en una roca a leer.

"Me ha contado, que al parecer te robas cada suspiro que da en el día, sin fijarse como estas en todo lo que hace y lo que piensa, eres lo que tanto esta amando cuidar y se apasiona el solo echo de pensar el estar contigo todo los días cada mañana y cada tarde sin dejar a un lado la noches."

- Leí.

La emoción hacia que mis ojos se saltaran palabras, letras; razónes y lógica... sólo quería seguir leyendo. Encontrar más pistas en esa hoja que empezaba a oler a recuerdos.

 

"Se ha dado cuenta que no voltea a ver el cielo cuando esta de noche, y se mete antes de que obscuresca, porque no le improta mas nada que hacerte sentir que es encerio por lo que ha vuelto, sonrie, y tambien ha llorado."

 - Seguí.

El silencio del camino ya no importaba, estaba segura que debía avanzar y tomar con mis pupilas fotografías de todo lo que estaba viendo, no quería perder ni un solo minuto más en ese cuento y podría avanzar siguiendo las pistas que alguién había dejado caer en el suelo. Así es cómo lo supe, tenía que aceptar un error. Tome la hoja y la doble cuidadosamente mientras la guardaba en mi bolsa, debía seguir y encontrarlo.

Ir... allá.

Y a lo alto de las ramas, encontrar en el firmamento la señal de que el Invierno terminó.

Correr por encima de las ramas persiguiendo los rayos de sol...

y encontrar en el hielo derretido, todo.

Memories...

Ayer una hada se acercó a mi oído cuando estaba a punto de dormir. Se acobijo en mi cabello ondulado y se tapo con el. Me cantó una canción que sigue sonando muy dentro de mis oídos, me dijo que la magia duraba hasta que la razón aparecía, entonces caí dormida... caí dormida.

Ayer un hada me bañó con sus polvos dorados, me hizo recorrer la vida a la altura de mi techo y me hizo tocar el viento con la piel erizada, escuchaba su canto hipnotizando mis latidos; me decía "Más allá de lo que ves, es en donde en realidad empieza la vida.." ¿Entonces la vida esta escondida?

-La vida esta escondida-

BREATH...

Y se que más allá de los Andes, estará lo que busco.

Escondido detrás de una montaña, como el tesoro... de un arco iris.

Y estando en la playa lo sabré...

Oyenos

¿Te haz olvidado de nosotras o aún nos dejas entrar en las noches a tu habitación? Hay tantos acertijos no planeados y todos acaban en esa conclusión. 
No te vayas a mil lugares con una sola muda, no dejes de invocarnos a la luz de la luna; no olvides lo que es sentir nuestra presencia, pasada la una. No olvides nuestro volar.
Las estrellas aún nos cuentan que te pierdes en las noches; que hace algún tiempo olvidaste que es pedir que te curen, que te cuiden y que te salven... ¿Lo olvidaste?
Te vemos desde esa pequeña repisa cada que logras conciliar el sueño, las pequeñas botellas nos sirven para que no nos encuentres con facilidad, vuelve a encontrarnos; a creer en nosotras, vuelve a soñar.

Diario de Cenicienta

Abrí los ojos y mis manos eran grises, las cenizas de la noche anterior seguían besando mi piel. Me levanté lentamente y entonces lo vi, nada había sido un sueño como lo imaginé. Me acerqué a esa única zapatilla que no se había rebelado, seguía conmigo e imagine que su par debía estar recorriendo el mundo en algún barco hacia alta mar.

Quizás no debí asistir a esa fiesta, quizás debí quedarme como me impusieron, ahora solo tengo recuerdos confusos de ojos sobre mi; de voces que susurraban suavemente sobre la música, risas que acompañaban la orquesta y un joven caprichoso que me hablaba al oído ¿Que decía? No lo se, pero probablemente nada bueno, ¿Donde dejé mi zapatilla?

El vestido azul, desapareció.

Escucha

Te la presto por hoy.

Uno nuevo...

Y bueno, no se porqué pero al parecer es época de bebes xD Ahora tengo un nuevo sobrino, uno que alomejor por sus papas no podré frecuentar tanto, pero sea como sea es lindo :)

Casi lo olvido..

Pústulas, pústulas me hacen olvidar,

que este blog debo actualizar.

Y aun con toda esta comezón; 

no se me olvida que estuvo todo el día conmigo mi corazón =)

16-04-12

Sin duda un año y medio se dice fácil y hasta lo suena... y la verdad es que a pesar de todo; haces tan sencillo que te ame, que pasen rápido los días y los meses; que cada vez que celebramos (puntual o impuntualmente) nuestros meses cumplidos suene como algo tan común. Quizás no lo sepamos, o no nos hayamos puesto a pensar que significan un año y medio siendo tú de mi y yo de ti, pero supongo que si nos ponemos a analizarlo, dice mucho... quizás demasiado.
Dice que durante un año y medio nos hemos estado conociendo a la perfección, que yo se que necesitas bañarte a diario por que sino te sientes sucio y tu sabes que yo soy más hippie y prefiero no desperdiciar agua en eso! Yo se que tu le gritas a tu gato cada vez que te resonga y que tú sabes que mis gatos son más oportunistas que nada por que yo así lo dejo. Se que hay unos foquitos de navidad por encima de tus cortinas y tu sabes que hay libros de romances extraños en mi biblioteca. Tu sabes que todas las pecas de mi cuerpo se llaman "Cookie" y yo se que tienes una "Cookie" justo a la mitad de tu labio superior, sabes que mi hermana se tarda los siglos en el baño y yo se que tu hermano menor dice "Oh crap!" cada que sucede algo malo o extraño. Son pequeños detalles, pero son los suficientes para saber que es lo maravilloso de decir: "1 año y medio con Matias."
Te amo y amo los días que pasamos juntos, sean 2 horas o 18, 45 minutos o quizás 10, los haces especiales. Tú y sólo tú haces que cada 16 sea un motivo para sonreír y agradecer que nos hayamos dado la oportunidad de hacer algo juntos... estar juntos.

Feliz día amor. Feliz año y medio.

Recuerdos de niñez.

Y bueno recuerdos del baúl trae para nosotros a ¡EL PEQUEÑO FANTASMA! Cuenta una historia (Casset en Alemán) de un pequeño fantasma que tenía 12 llaves con las que cerraba las 12 cerraduras de las 12 puertas de su castillo, dormía inquieto pensando cómo sería el sol y los colores así que un día se armó de valor y abrió 1 de las 12 cerraduras y fue a mirar el sol y los colores, pero no sabía que hacerlo conllevaría a un extraño cambio.. ¡Sin duda una gran historia! Aunque debo admitir que sólo la escuché por que mi casset de la Cenicienta se había destruido (Si, yo lo eche a perder) Aquí un poco del pequeño fantasma BUUU!

El puente 90

El pantano era enorme incluso para ese ser de grandes dimensiones, el hombre lobo colocó suavemente los restos del girasol sobre el suelo evitando que la hierba mala quisiera apropiarse de él. Su respiración era cada vez más suave y calma, algo en su corazón tenía ciertos recuerdos humanos, no podía despegar de su mente la mirada de su hermano. En el pantano se escuchaba un extraño silencio acompañado del canto de grillos que por alguna extraña razón aumentaban la quietud del lugar, el agua escondía muchas criaturas pero ninguna que no temiera al hombre lobo, hasta entonces él estaba seguro ¿Pero por cuanto? Había perdido la cuenta de lunas que favorecían a su maldición. Sus ojos se movían siguiendo la danza de algunas luciérnagas, era tan extraño para él sentirse en parte animal, en parte humano; en parte bestia y en parte un hermano preocupado por alguien a quién había traicionado. La criatura se acostó suavemente sobre la hierba y colocando el girasol sobre su pecho, se quedó dormido. 

No pasó mucho tiempo cuando de pronto el agua del pantano comenzó a burbujear. El hombre lobo se sobresaltó sin descuidar la flor y corrió a esconderse tras un árbol seco, un tentáculo salió del agua y suavemente se desplazó por la hierba como tentando el pasto en busca de algún alimento. Al no encontrar nada se deslizó de nuevo hasta el agua desapareciendo frente a los ojos del hombre lobo, pánico es lo único que sentía en ese momento... un mal indicio, pues los hombres lobo no conocen el pánico; Andél estaba por volver.

¿Cómo puede hacerte sonreír?

Abre los ojos, ábrelos lo más que puedas... mira a tu alrededor y desconocelo.  Respira como si hubieras olvidado como hacerlo, hazte extraño de tu propio existir y camina hacia la ventana que nunca haz querido abrir, deja que respire; deja que te vuelva a ver. Camina hasta donde no quieres llegar y mira al mundo desde ese balcón por el cual solías vagar; olvidaste cómo volar?

¿Olvidaste como volar?

Extiende esa parte elástica de tu alma, la que te dice que no todo es verdad. Regresa a donde solías estacionar tu coche a mitad de la noche con la radio encendida y grita; grita hasta que veas tres lamparas encendiéndose a la distancia, recuerdas como vivir? Lo haz olvidado? O quizás necesitas volver a aprender.

¿Quieres que aprendamos juntos?

Destapa tus oídos, destapalos cuando antes... deja que el sonido ahogue tus pensamientos y escucha por primera vez tu voz. ¿Es linda no? Impresionate de nuevo al escuchar esa canción favorita en  la radio, la que te hacia gritar a mitad de la noche, camina en esa calle que haz olvidado visitar, abraza con los ojos esa vida que no te ha abandonado, solo ha olvidado cómo hacerte sonreír...

¿Cómo puede hacerte sonreír?

Es húmedo, tan húmedo el camino si, pero donde hay gotas de lluvia cuando menos lo imagines habrá vida, donde hubieron lagrimas habrán sonrisas y recompensas que todos los días verás pasar. Todos los días, verás pasar.

MI TOBILLOOOOOOOOOOOOOOOO

:(

El puente 89

-Recuerdos de Él-

Musiel paseaba por las arenas blancas de un mar que estaba lejos del castillo, Andél y Él estaban en esa etapa donde los problemas de su alrededor hacían que ambos olvidarán sus diferencias y solo se concentrarán en sentirse mejor. "¿Crees que Mamá ame aún a Papá?"- preguntó Andél sorprendiendo a Musiel dado que la mayor parte del tiempo él era el que tenía preguntas o ideas pesimistas. -"No lo sé, sólo se que hace mucho no veo ese brillo en su mirada." Musiel recordaba los ojos amielados de su Mamá, siempre con un brillo especial pero ya era extraño verlos así. "¿Te puedo confesar algo Andél? Y esta vez promete no correr a contarle a Papá."- gruñó Musiel mientras se colocaba frente a su hermano que era más alto que él pero por alguna extraña razón parecían verse a los ojos a la misma altura. -"Lo prometo ¿Que pasa?" -"Siento que Mamá ha estado alejada de algo que la llena de vida, no se exactamente que es, pero se que existe y que la he visto buscarlo en el jardín por las noches." -"Yo también la he visto merodear en el jardín en las últimas madrugadas." -"Es magia Andél." El hermano mayor veía extrañado a el joven despeinado que no quitaba su vista de él. -"¿Aun sigues con esas cosas?" -"Sabia que no podía hablar contigo de esto..." -"Musiel, el Abuelo se fue por las mismas locuras que estás diciendo." -"No es verdad, el se fue por que la abuela cometió un error." -"Un error que se hubiera evitado si el no hubiera comenzado con sus disparates e ideas locas de magia, duendes y hechiceros." -"Tu no sabes nada." - dijo Musiel mientras lanzaba el primer golpe al rostro de su hermano quién cayó sobre si mismo y mientras limpiaba la poca sangre que salía de su labio se levantó como pudo. -"Si te digo esto, es por que no quiero perderte como al Abuelo." -"Estamos perdiendo a Mamá por que nadie quiere enterarse de que conoce la magia, perdimos a mi Abuelo, por que nadie le preguntó que de verdad llevaban sus historias." ,"Tu se lo preguntaste y aún así se fue." - susurró Andél mientras daba la media vuelta y se alejaba de su hermano. "¿Cómo sabes que se lo pregunté?" -gritó Musiel viendo a su hermano cada vez más lejos. "¡Contéstame!" -"No eres el único que quería escuchar historias maravillosas Musiel, solo que hay quienes no tenemos el valor de escucharlas de frente y nos sentamos escondidos tras una columna, escuchando lo que el Abuelo le dice a tu hermano menor.

Diario de Rapunzel

"Hace siglos que no veo ojos que no sean los míos; he aprendido a distinguir los tonos de mis pensamientos para no sentirme sola. Aprendí a leer mis labios cuando no quieren dejar libres palabras... todas las noches miro a través de mi ventana e imagino que regresarás. ¿Recuerdas? Aún puedo sentir el calor de tus mejillas, el verde de tus ojos sobre el horizonte, te despedías prometiendo volver. Llevo esperándote y mi cabello crece esperando tu retorno, seguimos esperándote y deseando volver a ver el verde de tu iris. "

"Cada día es una escusa para volverte a pensar, he decorado sin fin de veces mis paredes con tus poemas y mi piel sigue tatuada con tus caricias. ¿Te acuerdas? Solíamos correr por los campos y prometernos la eternidad, ahora estoy aquí eternamente solo tuya y tú? ¿Donde estarás? Mi cabello desciende la ventana 6 veces al día, 8 veces por noche y se que falta solo un poco
para llegar justo al pasto; aveces se quieren subir las catarinas que despegan del suelo, pero no lo permito, es solo tu escalera. Imagino que lo escalarás decidido, que al alcanzar mis labios y los robarás, hace siglos que espero tu regreso."

Debatir...

Con los ojos fijos en los de alguien que te ha enseñado... al que le haz enseñado y al final estar de acuerdo en que cada quien siempre tendrá su propio y único pensar, saber que después del debate todo seguirá igual que hasta ese punto; que quizás vuelvas a compartir ideas y que más de mil veces serán las mismas, compartir con esa persona tu filosofía y apreciar la de el... creo eso es debatir.

El puente 88

-Recuerdos de Ella-

La primera vez que Nathanielle fue designada a crear un girasol fuera del mundo mágico fue en una noche clara y estrellada donde la pequeña hada volaba encantada pensando donde podría crear su primer girasol, el primero que viera un humano y el primero de muchos en decorar el mundo mortal. "No creo que sea tan difícil. Tiene que haber un lugar perfecto, donde pase el viento a saludarlo y la lluvia lo acaricie cada que sea necesario, un lugar donde la luna y el sol lo besen y cualquiera lo pueda ver." - se decía a si misma la pequeña hada que iba vestida con un corto vestido dorado con encaje verde pistache. La luna la ayudaba iluminando suavemente una colina que se veía algo lejana pero lo suficientemente hermosa para llamar la atención de Nathanielle. "Ahí es". La hada voló rápidamente hacia ese lugar y al posar sus diminutos pies sobre el pasto lo sintió, era un viento fresco y agradable que la invitaba a comenzar. Alzó ambas manos más allá de su rostro y cerró los ojos. -"Tienes que ser el mejor." El tallo nacía lentamente del suelo y brotaban cada ves más pequeñas hojas verdes, las hojas crecían una a una con delicadeza; parecían rayos de sol diminutos. Nathanielle seguía con los ojos cerrados hasta que sintió detrás de sus parpados una luz intensa que no provenía de su girasol, al abrir los ojos volteó rápidamente hacia el cielo y pudo ver como una estrella caía con rapidez hacia su girasol, asustada corrió a esconderse detrás de una roca que no estaba lejos del girasol y la estrella. -"¿Que señal es esta?"

En el mar...

Imagina las olas en la obscuridad, escuchalas... pues no puedes verla, solo la espuma del mar que la luna vuelve plateada. Imagina tus pasos, tus huellas hundidas en la arena blanca que tú ves negra por que al luna se aleja para dejarte pensar un rato en esas olas que no ves pero escuchas venir. Siente la brisa cálida de un mar negro y siente como el agua del mar va poco a poco mojando tus zapatos y la parte más baja de tu pantalón, te invita a nadar... escuchas voces que te acarician la piel, son sirenas que quieren jugar contigo encima de las ostras., debajo de la luna ,que regresa para iluminarte al nadar.
¿Nadarías con las Sirenas o caminarías por esa playa negra hasta encontrar el final del mar?

Sun & Flowers

Hold me.

Sólo rodeame con tus brazos. Dime que el sol siempre cambia de color, dime que el aire tiende a ser pesado pero que esto se pasa rápido y se vuelve ligero a la brevedad. Abrázame fuerte, en silencio mírame a  los ojos y convenceme de que el cielo sigue siendo azul y que cuando se vuelve negro es por que va a amanecer.

El puente 87

"¿Entonces una araña?" - susurró Musiel al oído de Nathanielle mientras Agatha volaba un poco más adelante de ellos junto a Griham. -"Si, ella estuvo enamorada de una araña la cual estaba compitiendo por ser una criatura mágica como ella. Pero en la última etapa de la competencia hizo trampa y bueno, lo castigaron." -"¿Le borraron la memoria?" -"Más bien sólo lo llevaron al mundo mortal, al mundo de humanos... donde es lógico que corre muchos peligros y cuando una criatura mágica es desterrada se olvida de todo." La hada contaba toda la historia de Agatha y Femix mientras Musiel la escuchaba impactado, quizás nunca hubiera sospechado que incluso los insectos mágicos tenían historias trágicas de amor y lamentos. Los 4 caminaron toda la mañana y tarde siguiendo las enormes huellas que había dejado el hombre lobo, todo indicaba que había entrado a una parte del bosque oculto; un bosque cuya historia muy pocos sabían y menos de ellos querían conocer. El bosque oculto era una pequeña porción de el bosque encantado, la diferencia es que ahí habitaban todas las criaturas peligrosas, en sus árboles las arpías descansaban de los rayos del sol; en las lagunas habían peligrosas sirenas sedientas de una presa que devorar, Minotauros y dragones pigmeos; sin duda el bosque oculto no era lugar para 4 desconocidos. "Me temo que ha entrado a la zona de arpías y sirenas."- dijo Griham mientras olfateaba una de las últimas huellas visibles por fuera del bosque. "¿Pero crees que el corra peligro allá adentro?" -preguntó Musiel. -"Claro que no muchacho, es un hombre lobo es temido por la mayoría de seres que habitan allá adentro, pero créeme que un humano; un troll; una hada y una libélula no inspiran más que apetito allá adentro." El jinete y la hada rieron asustados mientras intercambiaban miradas. "Yo quiero que encontremos a tu hermano." -"Yo quiero que encontremos tu girasol." Al dar el primer paso dentro del bosque Nathanielle volvió a recobrar su forma humana. "¿Porqué?" -"En cualquier lugar con magia yo vuelvo a parecer normal." Musiel la tomó entre sus brazos y la besó delicadamente. -"Ya extrañaba abrazarte." le susurró. 

Yo no pongo canciónes pero... esta no la supero :)

"Será una noche perfecta... al nuestros ojos cerrar.

Poder tenerte tan cerca, me hace el cielo tocar.

Olvidando los días que no se pueden borrar...

memorizando momentos que nunca podré olvidar.

Sublime amor. Sublime amor.

Sublime amor."

El puente 86

"Dijo que le regresaría su memoria." - dijo Agatha mientras Nathanielle intentaba abrir con esfuerzo el recipiente donde Lesia la había guardado. Musiel se acercó y las ayudó mientras veía decepcionado a la libélula. -"Yo no quería causar nada de esto, lo siento." La hada y el jinete no respondieron a las palabras de Agatha y se acercaron al agujero para verlo más de cerca, era profundo pero no demasiado; solo lo justo para que no quedara ninguna de las raíces doradas del girasol. -"Yo creo que ha sido tu hermano el que se lo llevó." -"Pienso lo mismo...¿Pero donde está? Estaba herido Nathanielle y seguramente se volvió a hacer daño y ahora lleva con él el girasol y no creo que Lesia tarde mucho tiempo en enterarse de que no destruyó la flor como lo deseaba." "Yo se donde puede estar Andél." - dijo Agatha volando hasta donde Musiel se encontraba. Ambos la miraban con curiosidad pero mil dudas atravesaban la mente de ambos, como confiar en ella? -"Nathanielle tu sabes de lo que hablo." -"Y te entiendo Agatha, pero si la hada de Sol hace tanto te dijo que sería imposible que Femix volviera a recordarte con magia blanca... no puedo creer como te atreviste a acudir a magia negra." -"Por que fue culpa mía que el terminara en el mundo mortal." -"No, Femix sabía a lo que se metía al intentar hacer trampa." Musiel solo miraba de un lado para otro siguiendo la voz de quien alegara un poco más. -"Yo no entiendo de que hablan y aunque desapruebo demasiado la traición, quizás tus motivos son válidos." Nathanielle miraba sorprendida al joven, al  verlo decidido en perdonar a la libélula ella sintió que debía hacer lo mismo, eran tiempos obscuros y tristes como para permitir que los enojos y rencores destrozaran lo único bueno que sobraba en el mundo mágico y mortal. -"Perdón." La hada abrazó a su libélula, en el fondo la entendía... si ella perdiera a Musiel volaría encima de cualquier mar y cielo con tal de recobrarlo de nuevo.

Ojos...

De formas, de tamaños con miradas diferentes. Que se sienten, que pesan; que se olvidan que te atraviesan. Esos que sonríen solo con reflejarse en tu pupila, otros que cautivan tu mirada. De colores, mil colores y en el iris pequeñas precipitaciones como ríos que carecen de agua. ¿Tus preferidos? Los cafés. Los que tapan casi todo el horizonte con detenerse frente a ti, los que callan y gritan; los que cambian a cada pestañeo. Ojos de formas y de sentidos diferentes; los que miran; los que ven... los que observan y paran el tiempo. ¿Los que buscas? Esos cafés que aveces cambian a ser más obscuros; que aveces los ves claros... que son grandes y quizás no perfectos; pero roban mi mirada, la roban todo el tiempo.

Tus ojos.