domingo, 20 de mayo de 2012
Flores moradas.
Caminaba en calcetas sobre la acera fría, los coches iban pasando a mi izquierda; iluminando mi costado. Usaba un vestido de flores, no recuerdo el color pero se que tenía pequeñas flores moradas. Mi cabello había perdido el peinado de salón que nunca antes me había hecho y mis pestañas iban empapadas de rocío, pues había estado lloviendo en la madrugada. La luz de las enormes lamparas de calle poco a poco se iba apagando y un sol naranja se encargaba de darle sentido a mis pasos. La dirección a la que iba tampoco la recuerdo, nunca la memoricé, pero era a un lugar entre dos calles desconocidas y en el tercer piso encontraría lo que había estado buscando toda la noche anterior. El edificio era alto pude contar unas 10 ventanas o quizás eran menos pero mi mente cansada empezaba a jugarme un juego de cifras y recuerdos que creo no gané. Al fondo del corredor tapizado con pequeñas flores moradas estaba la habitación que estaba buscando, número? Ese no lo he olvidado, me había estado siguiendo a todos lados... y al abrir la puerta ahí estaba sentado en la cama observando su reloj. Volteó a verme y sonrío yo reí y cerré la puerta tras de mi.
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es como encontrarse en algún lugar con la persona que amas, como una cita a ciegas, pero en un sueño, tan real que no hace falta almohada... me gusto
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